RECICLAR es un acto de mucha importancia para la sociedad, con el mismo se logra la clasificación y reutilización de diversos objetos en función de sus características, que de lo contrario serian desechados; de esta manera se disminuye significativamente la cantidad de basura que generamos y por ende se contribuye a conservar el planeta.
Lo bueno de esta actividad, además de ser súper sencilla y gratificante, es que pueden participar todos los miembros de la familia, incluso los más pequeños de la casa. Y muy a pesar de ser el humano el principal responsable de producir la mayoría de los residuos, parece que aún se resiste en gran medida.
Al ser una actividad ligada directamente con la ecología y la sustentabilidad, esta supone también aprovechar los recursos que la naturaleza brinda, pero sin abusar de ellos y generar daños significativos. Entonces, surge la incertidumbre:
4 Razones de la importancia de reciclar que ayudan a cuidar el medio ambiente
El impacto del reciclaje en el medio ambiente es muy profundo y te diremos a través de 4 razones por que reciclar es bueno para el medio ambiente:
1. Se utiliza menos materias primas: al momento de reciclar materiales como el vidrio, el plástico o el papel, no se genera la necesidad de utilizar tantas nuevas materias primas para elaborar un producto, de esta manera se ahorra una gran cantidad de recursos naturales.
2. Se presenta la oportunidad de fabricar nuevos productos: a partir del reciclaje se crean nuevos productos, en su mayoría caseros y cotidianos, que facilitan la vida y lo mejor es que no se gasta absolutamente nada de dinero. Con esta reutilización se reduce la contaminación ambiental.
3. Se ahorra energía: al reciclar se reduce el trabajo de extracción, de elaboración de materias primas, lo que conlleva a una disminución significativa en el uso de energía.
4. Preserva el ambiente: si se recicla, las industrias contaminan menos el aire, se protegen los suelos porque la clasificación de los materiales ayuda a que los residuos lleguen al lugar que les corresponde, por lo tanto no se acumulan en las aguas de los ríos y mares. También se protege el hábitat de muchas especies.
¿Qué materiales se pueden reciclar y cuales no?
En la actualidad, debido a los avances tecnológicos, se nos permite reciclar prácticamente todo; sin embargo no todas las personas cuentan con los implementos para hacerlo; aunque esto no debería ser una limitación, ya que casi todos los elementos que se encuentran en una casa, en el trabajo, o en el ambiente se pueden reutilizar y reciclar; sin embargo aquí te ayudaremos a que aprendas a identificar los materiales que realmente pueden ser reciclados.
Para ello, lo primero que se debe hacer es separar y clasificar los materiales en cubos preferiblemente grandes, colocando etiquetas para identificarlos de manera más fácil, por ejemplo, un cubo para: materia orgánica, envases de plástico, cristal o vidrio y papel; con tan solo esta sencilla, pero muy efectiva clasificación ya se puede comenzar a reciclar.
Pero como ya debemos saber, el hecho que el material sea alguno de los anteriormente mencionados, no significa que este apto para ser reciclado, ya deben cubrir ciertas condiciones. A continuación te diremos algunas de ellas, según la naturaleza del material:
Materiales que se reciclan
Papel y Cartón:
La cual se obtiene de los árboles, por lo tanto, el reciclado del papel va a evitar la tala innecesaria de los mismos.
- Revistas
- Periódicos
- Papel de impresora
- Papel de cuaderno
- Sobres
- Cartones de huevos
- Bolsas de papel
- Libros de pastas suave
Vidrio y Metal:
Con el reciclaje de vidrios y metal se ahorra energía, disminuye la extracción de materias primas, disminuye el volumen de residuos.
- Botellas de vidrio
- Latas de refrescos
- Frascos de vidrio
- Platos de aluminio
- Contenedores de aerosol
Plástico:
Con el reciclaje de plásticos se reduce el consumo de petróleo, se reducen los residuos.
- Envases de refrescos
- Champú
- Mayonesa
- Vasos desechables
- Envases de comida
Materiales que no se reciclan
- Libros de pastas duras
- Papel de baño
- Servilletas
- Platos desechables
- Bolsas de plástico
¿Cómo se recicla un plástico?
El plástico es protagonista en casi todos los objetos que usamos en nuestras vidas, su uso es muy común y representa más del 12% de la cantidad de residuos sólidos en las ciudades.
Sin embargo, pocos realmente saben cómo es el proceso para reciclar el plástico, la cual hace que esos residuos aumenten gradualmente. Aquí te explicaremos de manera resumida como funciona dicho sistema:
Lo primero que hacen las plantas de reciclaje de plástico, es seleccionar el plástico que realmente puede ser procesado, luego pasa por otra separación según el tipo de resina que hayan usado para su fabricación.
Seguidamente se eliminan las impurezas adheridas al envase como las etiquetas, luego se tritura y se funde para mezclar bien la resina; con ello se forman una especie de bolitas que se introducen en las maquinas que elaboran objetos de plástico, como botellas o envases.
¿Cómo se recicla el papel?
El papel es una material formado por una pulpa de celulosa, una pasta de fibras vegetales y diluidas en agua. Es muy material que gracias a sus fibras puede ser reciclado varias veces, hasta que se convierte en algo inservible.
Veamos de manera condensada, como se recicla el papel:
El primer paso que hacen las plantas que reciclan papel, es recopilar la mayor cantidad posible de papel y este se consigue en los contenedores de papel dispuestos en toda la ciudad e incluso en las industrias.
Seguidamente todo ese papel es convertido nuevamente en pulpa de celulosa a través de medios químicos. Luego esta pasta se prepara en un aparato llamado Pulper, donde se mezcla con agua; funciona como una batidora cuyo propósito es separar las fibras que forman la pasta de papel.
Luego a la pasta se le coloca diferentes aditivos para darle las propiedades buscadas (blancura, mayor resistencia, menor porosidad, entre otras).
El siguiente paso es el trabajo de fabricación del papel, a través de un tamiz. Es una especie de caja alargada, en su interior circula la pasta y en su parte superior se forma una lámina, de allí comienza el proceso de secado.
Después pasa por unos rodillos y mediante presión exprime el resto del agua. Una vez seco, ya las fibras se han juntado y se forma lo que conocemos como papel.